sábado, 11 de junio de 2011

Capitulo 17.


Capitulo 17:
Dani & Samuel son.....
-¡HERMANOS!
-¿Qué pasa hija? ¿Qué dices ahora de hermanos?
-Nada, nada... me voy a la cama... tengo sueño. Mañana hablamos. - La dí un beso y me tumbé en mi cama. No pegué ojo en la mayor parte de la noche no tenia nada de sueño.
Por la mañana me levante y fui directamente a la cocina. Se me olvidaba que era Sábado y me tube que volver a dormir sigilosamente. Bueno, a dormir, a intentarlo al menos. Era todo una tortura. Ahora entendia porque mi madre no quería que Dani fuese mi novio, su madre "mató" a mi tio... ¿Por qué tiene que tener casualidades tan malas la vida? Y, ¿por qué me he tenido que enamorar del chico equivocado...? Ahora mismo si siguiera con Javier esto no estaría pasando, en absoluto.
Como veía que no podía dormir, decidí vestirme. Me pusé una camisa larga, blanca y con un cinturón beys y unos leggins negros. También me puse un collar color bronce de una mariposa y unas sandalias a juego con el cinturon de la camisa.www.polyvore.com/cgi/set?id=32530803&.locale=es Decidí abrir la puerta sigilosamente para que mis padres no se despertaran y me fuí. Empecé a dar vueltas por mi manzana hasta que a lo lejos ví una moto. Empecé a correr trás ella, a muchísima velocidad.
-Para! Para! - gritaba yo. No sabía por qué, simplemente tube la intuición de que era Dani, y fuí trás él. - PARA JODER! - De repente paró la moto. Estaba de espaldas y yo solo veía que tenía la chaqueta de cuero. Seguido, se quitó el casco y se bajó de la moto. Se dió la vuelta y...
-¿Qué quieres? - Me preguntó aquel chico desconocido.
-No nada... Lo siento, te había confundido.
-Joder, las tias de aquí sois muy raras.
-¿Perdón?
-Que las chicas de aquí, sois muy raras. - Dijo un poco más alto.
-Oye perdona, ¿Quién te crees tu para venir a las 9 de la mañana aquí a insultarme?
-Has sido tú la que se ha metido en mi camino.
-Sois todos unos imbéciles los de la zona baja.
-Oye niñita - dijo acercándose amí - a ver si la imbécil vas a ser tú y te voy a meter dos hostias y vas a ver lo que es meterse con uno de las chaquetas de cuero.
-No te atreverás a tocar un pelo a una chica ¿verdad?
-¿Qué no?
-No, no lo harás - Dijo una voz detrás de mi. Me giré, era Dani.
-DANI! - Dije yo entusiasmada.
-Como vea que te vuelves a meter con Nora, te juro que estás muerto, ¿estamos? Pues eso. Coje tu moto y lárgate de aquí.
-Chts. - Se limitó a protestar el imbécil ese. No sabía como se llamaba, pero tampoco me importaba mucho. - Pues que sepas que... si tanto quieres a esta chica...
-¿Qué pasa aquí? - Era Samuel. Mierda!
-Bueno, eramos pocos y vino el segundo pijo - Dijo el chico de la moto. - Bueno, como iba diciendo si tanto la quieres...
-Sí, la quiero. - Dijeron Samuel y Dani.
-¿Qué? - Dije yo. -¿Dani, Samuel? No me lo puedo creer...
-Madre mia, esto es mejor que un culebrón. - Dijo de nuevo el imbécil.
-LÁRGATE, ¿QUIERES? - Dijo Dani.
-Puf, que humitos. - Dijo. Se montó en su moto, se puso el casco, y se fue.
-¿Que quieres a Nora? - Dijo Dani con una cara de muy mala leche.
-Sí, la quiero - Respondió Samuel.
-¿Qué quires a Nora? - Dani, se tiró encima de Samuel y calleron al suelo, empezó a darle puñetazos y de nuevo, me subí a su chepa para que le dejara en paz.
-Déjale joder, déjale, para! - Gritaba yo. - PARAAA! - Le eché para atrás. Caímos uno encima de el otro. - Eres un imbécil, inútil. - El se me quedó mirando. No sabía que decir, sabía que él habia echo mal, pero como siguieramos en esa situación me iba a atrever a besarle. - Quita. - Dije yo, y me levanté. Ví que Samuel estaba sangrando por la nariz y me fuí hacia donde estaba. - ¿Estás bien? - Le pregunté.
-Sí, solo tengo un par de rasguños y me sangra un poco la nariz, solo eso.
-¿Estás loco o qué? Eres un imbécil. Vete de aquí no quiero saber nada más de ti. - Le dije a Dani gritandole. Él no dijo nada, simplemente se limpiaba el labio que lo tenía un poco roto.
-¿No quieres saber nada más de mí? - Dijo.
-¿Después de esto? Nunca en la vida. - Le dije.
- De acuerdo. - Se montó en la moto y se fué. Le seguí con la mirada y los ojos se me llenaron de lágrimas.
-¿Por qué has echo eso? - Me preguntó Samuel.
-Tenía que hacerlo. Ahora mismo me acaba de demostrar que no me quiere al pegarte...
-Au.. me duele ... ¿Me acompañas a mi casa a curarme?
-Claro, vamos.
Fuimos a su casa, que no estaba muy lejos. Entramos a la cocina, y abrió el mueble donde tenia todos los medicamentos. Sacó el agua oxigenada.
-Espera, te lo echo yo- Le dije. Saqué un algodón y se lo empecé a curar. -¿Tienes un hermano? -Se me ocurrió preguntarle.-
-No, que yo sepa no...
-Anda...
-¿Por qué?
-No sé, me recuerdas familiar...
Le curé la herida y subimos a su habitaición. Me dijo que tomara asiento y me senté en su cama. Él a mi lado.
-Como habrás oído, yo te quiero...
-¿Me quieres? Sí solo llevamos un día juntos..
-Tú me conoces desde hace un día, yo te llevo observando desde hace varios... Te ví cuándo estabamos haciendo la mudanza.
-Valla...
-Te quiero Nora. - De repente, se acercó a mi, su frente tocó mi frente, su nariz, la mia, y sus labios... sus labios estaban tocando los mios, me estaba besando. Me recordaba tanto a como era con ... Dani... Su hermano.. Estaban enamorados de mí los dos hermanos, y ellos dos no lo sabían.
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